Google ha empezado a incluir apartamentos turísticos en los resultados de búsqueda sobre alojamientos. Es otro paso más del buscador para cerrar el círculo en torno al sector de los viajes, donde todavía no intermedia, pero siempre existe la sombra de sospecha de que lo hará en algún momento. Hasta ahora, la información sobre apartamentos que Google ofrece es muy básica. Los metabuscadores, e incluso las webs como Airbnb, tienen otro motivo para temblar.
No es raro que Google haya empezado a incluir anuncios de apartamentos en sus búsquedas. Diversos informes de consultoras constatan que en los próximos cinco años el mercado de alquiler vacacional crecerá un 7% de media. Es difícil cuantificar el volumen de negocio de este mercado en todo el mundo, así que hay que referirse a los principales gigantes. Por ejemplo, se calcula que Airbnb puede facturar 10.000 millones de dólares en 2020. Y Google quiere un trozo de ese pastel.
El gigante estadounidense no funciona como un intermediario. Es decir, de momento, su modelo de negocio no se basa en cobrar una comisión por cada reserva que se realiza en un hotel que aparece en el buscador. En línea con su principal fuente de ingresos (los anuncios contextuales), la empresa de Silicon Valley ofrece Google Hotels Ads, una solución para que los hoteleros anuncien sus alojamientos en el buscador y aparezcan de esa manera en los resultados de búsqueda, mezclados con otras propuestas como las de Booking o Expedia. Google cobra por estos anuncios, pero no por las transacciones que cierren los hoteleros con sus clientes, modelo que sí siguen webs como Booking.
Hasta ahora, la información sobre apartamentos que aparece en los resultados de búsqueda es facilitada por Booking y es seguro que le seguirán otros proveedores, como Expedia. La cuestión es si Google abrirá su producto Hotels Ads a los propietarios de apartamentos, para que se anuncien en el buscador de hoteles como ya pueden hacer los gestores hoteleros. En los próximos meses lo sabremos, a tenor de las nuevas funcionalidades que incluya la empresa californiana en su buscador.
En cualquier caso, si Google pone en marcha la búsqueda de alquileres vacacionales, casi todos los actores del mercado se verán afectados. A las webs intermediarias, como Homeaway o Airbnb, les sale un competidor feroz, si no en modelo de negocio sí en la visibilidad que ofrecerá a los propietarios. En regiones como Europa, el 90% de los internautas usan Google para buscar cualquier cosa en Internet. Por su lado, el propietario tendrá una opción diferente en la que pagará por visibilidad y no por operación cerrada. En tercer lugar, los metabuscadores, como Kayak, pueden ser los más perjudicados, porque Google seguramente incorporará información de otras webs, permitiendo la comparación directamente.
Con toda seguridad, quien ganará serán las empresas que desarrollan tecnología para conectar los datos de los propietarios con Hotels Ads. Y Google, por supuesto.